Es un año nuevo y toca mirar atrás y recordar. Igual que 2018 fue un gran año, 2019 fue un año de mierda en todos los aspectos y 2020, a pesar de todo, tuvo sus puntos buenos. Tanto, que este año, a pesar de la coronacrisis, ha sido bueno en comparación. Que ya es triste.

Ahí dejo algunas cifras, aunque podréis ver mi año de escritora y viajera en escribolee y mi año de lectora, cinéfila y amante de la cultura y el ocio en escriboleeo: 1 gran viaje al extranjero (maldito Covid). 2 viajes por España y 2 escapadas. 40 relatos cortos. 0 libros publicados. 122 reseñas de libros. 54 reseñas de películas. 5 reseñas de series. 17 reseñas de cómics. 10 crónicas de eventos y visitas culturales, 8 vídeos. ¿Flipáis? Yo también. Vale que sea una experta en gestión del tiempo (por algo publiqué ¿Dónde está mi tiempo?), que lo llevo todo al día sin problemas y que tengo una buena reserva de entradas… Y vale que he bajado las cifras con respecto al año pasado, pero creo que sigo teniendo demasiada vida digital (aunque este año también hay excusa).

En cualquier caso, y como esto va de 2021, diré que este año no ha costado hacer mi selección de lo mejor (os pongo un índice de acceso rápido porque va para largo):

Selección de Relatos cortos que he escrito este año:

Relatos cortos de fantasía y relatos ciencia ficción (de estos últimos, este año hay pocos):

• Luz eterna: Debían mantener una vela encendida frente al espejo siempre, solo con eso ya me tenían contento, ¿de veras era tanto trabajo para una familia entera de brujas poderosas agradecer a su demonio guardián su dedicación con ese pequeño gesto?
• La fobia del superhéroe: Era un superhéroe y no había quien le venciera… salvo cuando veía una araña y se ponía histérico. ¿Será su derrota definitiva?
• Turistas espaciales: Ftrig ha encontrado la forma de sacar los cuartos a los humanos: turismo espacial. Pero necesita fondos… ¿Los conseguirá?
• Un mundo de agua: ese mundo de agua no era apto para la explotación o la colonización… ¿o no era lo que parecía?
• Un pozo miserable en el desierto: ese fue el premio por sus servicios. Pero ella estaba satisfecha porque el lugar escondía grandes secretos y tenía planes…
• Juego peligroso: Había jugado un juego peligroso recibiendo sobresueldos de tres empresas rivales. Ahora, han descubierto su juego y quieren venganza, ¿estará preparada para hacerles frente?
• El nigromante: esperó hasta la luna nueva para pronunciar el terrible hechizo del pergamino secreto que había llegado a sus manos, por fin podría vengarse… ¿o no?

Relatos cortos románticos: No he estado muy romántica este año…

• La novia desaparecida: No quería casarse con una desconocida pero, cuando llegó el barco que la traía, ella no estaba y en unos minutos su vida cambió…
• El disfraz ¿in?correcto: asistió a la fiesta con un disfraz muy original, pero nada despampanante, así que no logró llamar la atención del chico que le gustaba… ¿Abandonará la fiesta?
• Cena cinco estrellas: El gato se comió la cena cinco estrellas que había preparado y la primera cita con la chica de sus sueños empezó en la pescadería… ¿Podía empezar peor?
• Un guante perdido en una mañana resacosa: Se pasó con el alcohol y acabó en la cama con quien menos esperaba, así que decidió marcharse antes de que despertara. Pero, ¿dónde estaba el dichoso guante? ¿Despertará él antes de que lo encuentre?

Relatos de otros géneros:

Mejores actividades de ocio y cultura del año pasado:

• Empieza el show: supo desde el principio que ese hombre impecable y de porte envidiable no era trigo limpio, pero sus amos se enfadaron… ¿tendría razón?

• Visita al Palacio de Liria
• Visita a la Real Fábrica de Tapices de Madrid
• Biblioteca Nacional: Exposiciones de Emilia Pardo Bazán, Manuscritos iluminados y Dante
• Ruta por el Madrid del motín de Esquilache
• Visita al Museo Naval de Madrid
• Ruta por la picaresca en el Madrid del s. XVII
• Imprenta municipal y Ruta por el Madrid del Siglo de Oro.

Viajes del año

Todos fueron buenos y no sabría quedarme solo con uno, así que me quedo con todos

Mejores libros reseñados el año pasado:

Este año tenemos…

• No ficción:
  • Viral – Juan Fueyo: plagado de datos sorprendentes y curiosos sobre los virus, es muy interesante para conocer las amenazas y oportunidades de estos seres que están más presentes de lo que podemos llegar a imaginar y sin los que no hubiéramos llegado a ser lo que somos.
  • La vida secreta de los genes – Derek Harvey: completísimo, hace comprender todos los aspectos de genética, herencia y evolución con ilustraciones, esquemas y ejemplos.
  • Imparables – Teresa Baró: un manual de comunicación centrado en las mujeres, muy útil y necesario.
  • La ilusión de la memoria – Dra. Julia Shaw: trata sobre nuestra memoria, sobre lo falibles que son los mecanismos de nuestra mente y cómo nuestros recuerdos pueden ser engañados fácilmente. Una lectura imprescindible para quien quiera saber más sobre cómo funciona su mente
  • Últimas noticias del universo – Jon Marcaide (5/5): una muy buena forma de acercar la astrofísica al público actual
• Novela
  • Reino de cenizas – Sarah J. Maas: final épico que me ha tenido en ascuas durante toda la lectura
  • La dependienta – Sayaka Murata: una novela que me enamoró, con un perfecto bicho raro que se esfuerza por encajar en las expectativas sociales por protagonista.
  • El highlander inmortal – Karen Marie Moning: genial, con grandes personajes, escenas divertidas y un vistazo a un mundo mágico cada vez más complejo.
  • El estilita -Uri Costak: un tono de cuento en el que el mundo moderno no acepta el estilo de vida atípico y la neutralidad.
  • Las tierras embrujadas – Susan Denard: La bruja de la verdad y El brujo del viento: un mundo interesantísimo con una complicada situación política, con grandes personajes, misterios y una trama cada vez más compleja e interesante. El anterior tampoco está mal.
  • No lo llames amor (No lo llames 1) – Noelia Amarillo: ambientada en una comunidad de vecinos del centro de Madrid, es un libro que mezcla comedia, romance y erotismo con un pequeño misterio con respecto a uno de los vecinos…
  • Marionetas sin hilos – Tadea Lizarbe: las protagonistas, con rasgos de psicopatía con los que conviven de forma distinta, están en el punto de mira de una organización con intenciones opacas, lo que engancha mucho.
  • Estados Unidos de Japón – Peter Tieryas: ¿Y si Japón hubiera ganado la II Guerra Mundial gracias a los mechas? Este libro explora esa ucronía de una manera brillante…
  • Orgullo y prejuicio – Jane Austen (5/5): lo he leído varias veces y siempre saco algo nuevo, me encanta la historia y la magistral pluma de la autora.
  • Documento 1 – François Blois (5/5): muy metaliterario y con unos protagonistas muy graciosos
  • Cero en historia – Gerard Florejachs, Dani Rodríguez, Jose Zubero (5/5): curiosidades históricas para los que quieran pasar un buen rato, mantiene la esencia del programa con un equilibrio entre lo divulgativo y la chorrada.

Mejores películas y series reseñadas el año pasado:

Series:

• The End of the F***ing World: una comedia oscura de adolescentes con problemas, extraños y con una relación muy especial.
• El conde de Montecristo: impresionante actuación y una trama soberbia

Películas:

• Mujercitas (1994): la mejor de todas las películas de Mujercitas, la más atemporal, con las mejores escenas y diálogos
• Spiderman: Lejos de casa: no soy imparcial, porque este Spiderman me encanta, pero esta película tiene de todo y me gusta cómo lidia para asumir el peso de la responsabilidad.

Mejores cómics reseñados el año pasado:

Triste, pero cierto. Solo los cómics de Zita: Viajera espacial y La leyenda se llevan la máxima puntuación

Qué os conté en las entradas-resumen de cada mes del año 2021

Enero: ¡la gran nevada!

¡Menudo principio de año! Tercera ola, asalto al Capitolio estadounidense (cada vez más cerca de la distopía…), un edificio en el centro de Madrid que vuela por los aires… y ¡la gran nevada histórica de Madrid! Debo decir que esta última, a pesar de sus inconvenientes, consiguió hacerme volver a la infancia. Hice muñecos de nieve, batallas de bolas y cosas así. ¡Me lo pasé genial! En la nevada más gorda que recuerdo, de peques, mi hermano y yo hicimos un sucio muñeco de nieve de 15 cm de alto con toda la que había en la terraza, ¡tenía que aprovechar!

Las vacaciones de Navidad, además, solo fueron interrumpidas para publicar resúmenes del año. En Enero publiqué un artículo muy personal en el que ahondo en mi relación con mi esclerosis múltiple.

Febrero: un mes más normalito

Segundo mes del año. Ha sido intenso: mucho curro, pero muy gratificante. Además, volvieron a desconfinar y pudimos retomar las clases de esgrima, tuve que ir a la oficina y aproveché el viaje para dar un paseo por Madrid… y a consecuencia de todo eso no he avanzado tanto con la novela, aunque ya dije que eso no corría prisa. Me lo estoy pasando pipa reescribiéndola y es, precisamente, porque voy a mi ritmo, sin presiones. En febrero, además, os hablé de las curiosidades sobre el origen de mi novela corta ilustrada, Eladil

Marzo: contenidos variados

Un nuevo mes, en este se cumple un año desde que nuestra vida cambió por culpa de la pandemia. Más de un año sin viajar al extranjero, estoy que me subo por las paredes… (publiqué mi top de los lugares que he visitado (fuera de España) para que se me quitara un poco el mono). Pero aquí seguimos, tendremos una Semana Santa atípica, pero no faltarán las torrijas y decidí compartir la receta. Por otro lado, ha sido un mes gratificante en el trabajo. Mi equipo quedó finalista en un concurso de los equipos de datos de todo WPP, y han decidido, gracias a nuestro trabajo, usarnos como ejemplo de caso de uso creativo de los datos.

Abril: primavera movidita

Este mes ha sido un no-parar. Mucho trabajo en el curro y recta final de la reescritura de la novela, que ya no tiene nada que ver con la original. La principal novedad del mes es que he decidido abrir un canal de Telegram (un fracaso, pero que nadie me acuse de no intentarlo). También os hablé de Mi top novelas románticas históricas

Mayo: mes de respiros

Junio: mucho ajetreo

Junio siempre ha sido un mes movido. Este no ha habido Feria del Libro, pero eso no me ha salvado de otros compromisos anuales, la mayoría por las celebraciones de mi cumpleaños. Aunque algunos de ellos fueron geniales, como mi visita al Palacio de Liria… También he empezado con la jornada intensiva en el trabajo, con lo que tengo más horas libres por la tarde, lo que me da tiempo a hacer cosas como el top películas de fantasía y ciencia ficción adultas. Ya estoy haciendo planes para aprovecharla al máximo…

Julio literario y cultural

Julio ha estado marcado por el calor y el horario intensivo. Eso de tener toda la tarde libre abre un mundo de posibilidades, así que me he pegado unas cuantas panzadas a leer, he logrado acabar la novela (¡por fin!) y he aprovechado todas mis visitas a Madrid para hacer rutas y ver museos (algunas crónicas salen este mes, el resto a partir de septiembre). Curiosamente, eso me ha hecho bajar el ritmo digital, así que no he publicado tantas reseñas y relatos como un mes normal. Eso sí, me curré un especial sobre ciberpunk, un género que me encanta.

Agosto de descanso

Agosto es para descansar y descansar es lo que he hecho, salvo por un cursillo de japonés que tenía pendiente y que ya acabé, y un curso de jeroglíficos egipcios que he empezado. Vacaciones en Galicia y escapadas a Madrid, proyectos de costura (que van para largo), maratones de lectura y series… Vamos, casi perfecto, si no fuera porque anularon la feria medieval de Navalcarnero y por la dichosa segunda dosis de la vacuna, que ha sido una angustia hasta que me la han puesto porque el retraso en esa dosis implicaba un retraso en mi tratamiento de la Esclerosis Múltiple. El caso es que, como eran vacaciones, he reducido mi actividad digital a mínimos, hasta las crónicas de las visitas culturales y museos las dejaré para septiembre y octubre (septiembre será a medio gas, para volver a coger ritmo), así que no hay mucho contenido este mes…

Septiembre: vuelta al trabajo y a los libros

Septiembre ha sido el mes de vuelta al trabajo, de vuelta a la oficina… ¡y de vuelta a la Feria del Libro! Una Feria del Libro que en principio no me convencía, con sus restricciones de aforo, pero que tuvo la ventaja de volver a ser como antes: menos aforo significa menos aglomeraciones, poder acercarse a las casetas sin asfixias y hablar con autores y libreros… En definitiva, disfrutar de los libros y muchas más oportunidades de encontrar esa joyita para que te acompañe a casa (como demuestra el hecho de que el primer día, con solo la mitad de casetas visitadas, ya estaba sin blanca…). También volvió la Lit Con, igualmente con restricciones, y asistí a dos de las charlas. además de hablar de Cómo me metí en el mundillo literario

Octubre: vuelta al extranjero

Noviembre: resaca post-viaje

Este mes ha sido de descanso. Después de la paliza de viaje que me pegué en octubre, noviembre necesitaba tomármelo con calma, y más cuando la fatiga golpeó con fuerza. Tanto, que el otro viaje que tenía planeado para el puente he decidido retrasarlo y utilizar esos días para descansar de verdad y avanzar todo lo posible para poner punto y final a las correcciones de la novela. A pesar de todo, hubo el mismo movimiento digital que habitualmente, incluyendo mi entrada de ¿Qué hace perfecto a un libro?

Diciembre: recta final del año

Diciembre. Mes de compromisos por excelencia. Eso significa que no he parado, aunque el respiro del puente de la Constitución me vino de perlas para avanzar con la novela (¡ya casi!) y para rediseñar algunas cosas de esta web. En el trabajo, ha sido divertido, porque he estado en el comité de la fiesta de Navidad y me encanta organizar estas cosas. También me he metido en proyectos interesantísimos. Y me pusieron la tercera dosis de la vacuna (esta vez con Moderna, en vez de Pfizer), que me dejó para el arrastre unos días. Pero por suerte pude recuperarme lo suficiente para seguir con el mes y ver las luces de Navidad de Madrid. Publico la entrada resumen casi a mediados de mes porque me tomo unas minivacaciones navideñas que consisten, básicamente, en una desconexión digital, porque mis vacaciones de verdad serán en enero. Aunque, tal y como está el panorama, no sé todavía dónde viajaré (porque viajar, viajaré).